No puedo hablar de que es lo que más extraño de ti.
Es tu cabello despeinado, tus dientes raros y la mirada que yo sólo veía. Tu mano fría con la mía y el calor de tu pecho, cuando más frío hacía era perfecta tu compañía, y no sólo cuando el clima era malo, me hacías mejores mis peores días.Tus largas conversaciones incluso cuando no sabías qué decir, por la aún así decías algo que me encantaba escuchar. Tus malas bromas y mi risa escandalosa de tus chistes buenos, que siempre me recordaban cuan enamorada estaba de ti. Tus pequeñas muestras de amor y aquellos sobrenombres que me tenías. Las llamadas largas y las tardes espontáneas, sin plan alguno, sin tener que alejarnos. Comer lo que fuera contigo por que cualquier cosa era deliciosa por nuestra presencia. El que me escucharas llorar y tu suave voz me diera cualquier consejo, y cuando yo te escuchaba a ti, siempre te di lo más sincero de mis palabras. Besarte sin poder respirar, estar al borde de morir sólo por estar hundida en tus labios...
Realmente no puedo hablar de que es lo que más extraño de ti, por que todo se resume a ti.
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